Choto

24 de septiembre de 2011

Sandro Rey, cómo mola

Sábado por la noche. Solo, en casa. Hoy no he quedado. Después de cenar, comienzo a hacer zapping por las distintas televisiones. De repente, desde la pequeña pantalla, unos ojos verdosos me miran con una expresión profunda y desafiante al mismo tiempo mientras una baraja de tarot abierta en abanico es sostenida a la altura de la boca.
Nunca negaré que siento una especie de fascinación morbosa e irracional por la programación televisiva nocturna, con esos encendidos debates sobre política y fútbol, con esos anuncios de contactos con pinta de ser más falsos que una moneda de tres euros, con esos acertijos absurdos y manipulados a más no poder, o con esos videntes que todo lo saben.  Sobre estos últimos, alguno podría decir  “si saben tanto ¿Cómo es que no conocen la combinación de la lotería y están ahí currando?” y posiblemente tenga razón, pero el vidente descrito anteriormente, de mirada profunda, cartas de tarot sostenidas, larga melena, cara de gitana (como diría Daniel Magal), expresión cadavérica, nariz prominente, sonrisa forzada y voz profunda, es una excepción.
Se trata de Sandro Rey (así se llama este gacho) y este sí sabe el número o la combinación donde va a tocar la lotería. La prueba es que dentro de su programa tiene una sección llamada “el número de la suerte” donde la peña va llamando y el gran maestro de la videncia les va diciendo uno tras otro el número o combinación ganadora. El problema es que SOLO se limita a decir el número, de tal manera que ese número que me da puede salir en el sorteo de la ONCE o en el de la rifa del colegio de enfrente. O puede salir en el sorteo de mañana o en el dentro de 100 años. Pero bueno, eso son sólo “pequeños detalles”. El caso es que él sí sabe ese tipo de cosas, por lo cual deducimos que está todas las noches en la tele porque quiere hacer un servicio a la sociedad…
El formato del programa donde sale este crack y que lleva por título “Conexión Total” me recuerda al de “Carrusel Deportivo”. Vemos una presentadora recordándonos que cuenta con los mejores adivinadores y repitiéndonos constantemente que llamemos para hablar con ellos(sería como Pepe Domingo Castaño). Luego sale en primer plano y asumiendo el papel de protagonista del show el tal Sandro Rey (¿Manolo Lama?), y en unos pequeños recuadros en las esquinas aparecen otros dos videntes que asumen un papel secundario, con intervenciones puntuales. El caso es que aquí, en lugar del “Pi-pi-pi-pi, haaayyyy gooollllll en Las Gaunas, Pepeeeee” del “Carrusel”, aquí hay un sonido de teléfono llamando y las palabras “una llamada tras otra” en de la entusiasmada presentadora.
Y luego cuando te pones a ver el programa, este depara grandes momentos. Recuerdo la noche donde fui a ver un partido de fútbol que fue absolutamente deplorable y soporífero, y cuando llegué a casa y veía a Sandro Rey mientras cenaba, me lo pasé mejor que en el partido. Qué gran momento ese de:

(Diálogo aproximado)

- Buenas noches, señora ¿en qué puedo ayudarle?
- Llamo para preguntar por mi marido
- Su marido tiene problemas de estómago ¿verdad?
- ¿Mi marido? Nooooo, si está muerto…

O esa que también preguntaba por su marido:

(Diálogo aproximado)

- ¿Está usted preocupada por el trabajo de su marido?
- Noooo, es que está en la cárcel.

Y qué decir de esa mujer de Alicante que llama para preguntar por su hijo:

(Diálogo aproximado)

- Está usted preocupada por su hijo ¿verdad?
- Bueno, es que mi hijo desapareció hace tres años y no se sabe nada de él.
- Sandro (al instante y sin dudar): Esta en Baleares. Sí, yo lo veo allí.

Imaginarse a la pobre madre rastreando toda la zona, llamando al Lobatón, todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado siguiendo la pista al hijo de esta señora sin poderlo encontrar, y llega el tío este y en un momento sabe su paradero.
Y encima a la presentadora se le cae la baba con las “predicciones exactas” de Sandro Rey.
En fin, seguiré escribiendo más sobre Sandro Rey y sobre los videntes y la televisión “alternativa” (Sandro Rey, de hecho, casi merecería una sección propia). Pero de momento, vaya por delante esta reflexión sobre los videntes de mi amiga Carrie Bradshow: “En Estados Unidos, la gente cuando tiene un problema va al psicoanalista. Aquí en España, llamamos a los videntes”.

1 comentarios:

Buenas noches Jurisprudencio. Quería darte el número de la suerte. Apunta 35.878, repito 35.878. Ale, bendición y buenas noches
 

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